Buenas noches!, Padre Dios.

Antes de cerrar los ojos,  los labios y el corazón, al final de la jornada,  ¡buenas noches!, Padre Dios.
Antes de cerrar los ojos, 
los labios y el corazón,
al final de la jornada, 
¡buenas noches!, Padre Dios.

Gracias por todas las gracias
que nos ha dado tu amor;
si muchas son nuestras deudas,
infinito es tu perdón. 
Mañana te serviremos, 
en tu presencia, mejor. 
A la sombra de tus alas, 
Padre nuestro, abríganos. 
Quédate junto a nosotros 
y danos tu bendición.

Gloria al Padre omnipotente, 
gloria al Hijo Redentor, 
gloria al Espíritu Santo: 
tres personas, sólo un Dios. 
Amén!

1 comentario:

  1. Antes de cerrar los ojos,
    los labios y el corazón,
    al final de la jornada,
    ¡buenas noches!, Padre Dios.

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